El 31 de mayo, el monasterio copto de Abu Fana [(1) y (2)], en Mallawi, en la provincia egipcia de Miniya, fue atacado durante varias horas por un grupo de unos sesenta agresores. Durante los últimos años, este monasterio fundado en el siglo IV, ha sido atacado repetidas veces por los islamistas.
En esta última acometida de crimen y violencia, cuatro monjes resultaron heridos de bala, otros tres han sido raptados, torturados, apaleados y amenazados de muerte si no se convertían al Islam y, posteriormente, heridos, fueron abandonados más tarde. El hermano de uno de los monjes se encuentra todavía desaparecido. También fueron infligidos importantes daños materiales. Este vídeo muestra la llegada de los monjes heridos al hospital.
Está claro que, si se ajustaran a la realidad las acusaciones de los islamistas a la Iglesia Copta de estar constituyendo un "Estado paralelo" en Egipto, muy posiblemente estos hechos no se producirían. También está claro que el Estado Egipcio -este sí, real y verdadero; y no fruto de las ensoñaciones criminales de unos iluminados- no hace todo lo que debería hacer por evitar esta situación que se alarga en el tiempo, persiguiendo a estos asesinos y poniendo coto a sus desmánes de todo tipo.
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